Unipost es una empresa del siglo XXI, es una empresa fruto de la era de la globalización. Si bien escapa, hasta ahora, ya veremos en el futuro, a la extensión de sus tentáculos capitalistas hacia fuera de los límites geográficos del estado propio, características de las grandes multinacionales globalizadoras, si participa de la pretención de crear una marca y un logotipo que derive en grandes cantidades de capital, por encima del capital de la producción. Su política de franquicias y sus campañas publicitarias así lo demuestran. Si Unipost pudiera sería sólo una marca con apenas empleados.
Desde el CSN cada vez vemos más claro que Unipost aspira al beneficio, pero no al beneficio que deriva de la producción, sino al beneficio mayor del "merchandising", al beneficio fácilmente vendible de una marca conocida.Por eso nuestra primera acción, llevada a cabo hace pocos días, la primera acción del CSN tenía como objetivo atacar a ese corazón de Unipost: su marca, allá donde la globalización más rápidamente se extiende: Internet.
Ha sido un éxito, de hecho, sigue siéndolo, sigue creciendo.Nuestros carros de combate cibernéticos han actuado en RED atacando en la red de redes a una araña que pretende extender su red. Nuestros carros de combate crecen poco a poco en número pero sobre todo en posiciones. Ya ocupan enteramente el buscador de blogs de Google. También se acercan en el Google general a las primeras posiciones. Si tecleáis "Unipost" o "Huelga en Unipost" o "Convenio digno en Unipost" lo comprobareis. También si tecleas "cibersindicato" te llevarás una sorpresa.Y nuestros carros seguirán creciendo gracias a la colaboración e implicación de los trabajadores y trabajadoras de Unipost convertidos en ciberactivistas.
Los sindicatos tradicionales, por fin, hacen sonar sus tambores de guerra y plantearán el ataque muy pronto. Nuestras manos estarán junto a ellos, apoyando y continuando su lucha en Internet. Ellos atacarán su producción, nosotros su logo.Nuestro ataque sólo se retirará si se cumple un Convenio Digno. Ya le conviene a Unipost hacer lo que esté en su mano para que éste sea posible. Porque nuestro ataque crece y se expande y no será el último... ni el más efectivo.
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